Mahou San Miguel abre una plataforma logística junto a su fábrica de Alovera (Guadalajara)

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Planta de Mahou San Miguel en Alovera, Guadalajara

Mahou San Miguel, empresa cervecera 100% española, ha iniciado la comercialziación de una nueva plataforma logística de más de 150.000 metros cuadrados que su ubicará en su fábrica de Alovera (Guadalajara), una de las de mayor capacidad de Europa. Lo hará de la mano de CBRE, consultora inmologística.

Las instalaciones logísticas se ejecutarán sobre una parcela de más de 250.000 metros cuadrados y tendrán una superficie alquilable de 150.000 metros cuadrados, bajo el modelo de "llave en mano" para un único inquilino o de forma modulable para dos o tres ocupantes, a partir de un mínimo de 40.000 metros cuadrados. El espacio estará operativo en el primer trimestre de 2021 y ofrecerá acceso a la ciudad de Madrid (a 51 kilómetros de distancia) a través del Eje Norte A2.

La nueva plataforma nace con el objetivo de cubrir, con altos estándares de calidad y conciencia de energía y sostenibilidad inmologística, la demanda de grandes superficies para actividades logísticas y de transporte por parte de los grandes operadores o retailers que realizan su logística inhouse.

Estará dotada de elementos que garanticen la sostenibilidad del edificio, con el aprovechamiento de la luz natural y la iluminación general mediante equipos LED, lo que permitirá un ahorro de consumo energético del 40% respecto a la instalación de luz artificial.

También se instalarán vidrios de doble acristalamiento para lograr una reducción del nivel acústico. Por todo ello, se obtendrá la calificación LEED, sistema de certificación de edificios sostenibles, desarrollado por el Consejo de Construcción Verde de Estados Unidos.

Las instalaciones dispondrán de una altura libre interior de 12,5 metros, contarán con múltiples muelles de carga (un máximo de 180, dependiendo de la instalación), plazas de aparcamiento para vehículos ligeros (hasta 754) y para vehículos pesados (60). Cabe la posibilidad de realizar almacenamientos automáticos de hasta 30 metros de altura, con un máximo del 25% del volumen edificable, tal y como permite la normativa urbanística.